Carta abierta a todas las organizaciones y activistas revolucionarios

En el Inicio de Una Nueva Etapa Política: ¡Por la Unidad de los Revolucionarios en La Lucha Contra el Avance de la Contrarrevolución!

Publicado por la Corriente Comunista Revolucionaria Internacional (CCRI, en ingles-RCIT), 29/12/2015, www.thecommunists.net

 

 

 

Mientras que la crisis del capitalismo se está profundizando y provocando más y más miseria y las guerras, la clase obrera y los oprimidos están políticamente desorientados por sus liderazgos populistas y reformistas. La parálisis política resultante crea un tremendo peligro para las masas populares que se enfrentan a una nueva fase política de la ofensiva contrarrevolucionaria de la burguesía. En tal situación, es de suma urgencia para los revolucionarios avanzar en la lucha por un nuevo Partido Mundial de la Revolución Socialista y por lo tanto, como primer paso, buscar la unidad en base a un acuerdo sobre las tareas programáticas y organizativas cruciales de la lucha de clases de hoy.

 

La situación actual del mundo no puede entenderse fuera del contexto del período que se abrió con la Gran Recesión en 2008. Este período de largo aliento se caracteriza por la caída de la tasa de ganancia y la decadencia capitalista. (Por ejemplo, la producción industrial del mundo de hoy, 90 meses después del comienzo de la última recesión, es menor que en el mismo periodo después de 1929!) En este contexto, la burguesía de todo el mundo tiene menos margen de maniobra para dar cualquier concesión a la clase trabajadora.

 

Como resultado, los capitalistas se ven obligados a acelerar sus ataques contra la clase trabajadora y contra las masas populares, como se ejemplifica en los numerosos programas de austeridad y privatización en Grecia, Portugal, España, Brasil, Sudáfrica, etc. Así como los ataques a los derechos de los trabajadores como vemos por ejemplo, en China, Corea del Sur, Camboya o Vietnam.

 

Por la misma razón los monopolios imperialistas están aumentando la super-explotación de los países semicoloniales (el llamado "Tercer Mundo") que resulta en los bárbaros programas del FMI, programas de reembolso de la deuda, el acaparamiento de la tierra y el aumento de la pobreza, como lo vemos en África, América Latina, India, Pakistán, así como en muchos otros países. Además, parte de las grandes potencias y sus lacayos están enviando cada vez más soldados, buques de guerra y la fuerza aérea para expandir su influencia en el Sur (por ejemplo, de la OTAN en Afganistán, Siria e Irak, la intervención de Rusia en Siria, la intervención francesa en Mali y CAR-Republica Centro-Africana, las tropas chinas en el Sudán del Sur, la Misión de la Unión Africana en Somalia, etc.).

 

Del mismo modo, la decadencia del sistema capitalista está intensificando la rivalidad entre las grandes potencias imperialistas(Estados Unidos, Unión Europea, Japón, China y Rusia). Por tanto, vemos un creciente número de conflictos entre las grandes potencias sobre sus esferas de influencia (por ejemplo, en Ucrania, en Siria o en el Este de Asia). Otros ejemplos de esta rivalidad son varios proyectos del imperialismo de Estados Unidos (por ejemplo, los acuerdos comerciales TTP y TTIP), así como de los nuevos imperialistas de Oriente (China y Rusia), que están desafiando la hegemonía de los viejos imperialistas occidentales (por ejemplo, el canal de Nicaragua, los Nuevo Banco de Desarrollo, la diseminación del comercio realizado en yuanes y rublos, etc.).

 

El resultado de esta aceleración de contradicciones del sistema capitalista mundial es un número creciente de las luchas de clases, levantamientos populares, ofensivas reaccionarias y contra-revolucionarias, golpes de Estado y guerras. La revolución árabe que comenzó en diciembre de 2010 es un buen ejemplo de esto: la clase obrera y los pobres barrieron dictadores brutales como Ben Ali, Gadafi, Mubarak y Saleh. Pero, a partir del momento que los liderazgos liberales e islamistas no pudieron ofrecer una perspectiva, la Revolución también sufrieron terribles derrotas como el aplastamiento de las protestas democráticas en Bahrein, el golpe de Estado del general Sisi en Egipto o el regreso de la vieja guardia de Ben Ali en Túnez. En Libia las grandes potencias apoyan a las fuerzas reaccionarias alrededor de General Haftar y tratan de forzar al gobierno burgués islamista en Trípoli a capitular. En Yemen, las fuerzas saudíes con su marioneta Hadi han invadido el país con el fin de destruir la revolución yemení.

 

En Siria la revolucionaria lucha de liberación continúa pero se enfrenta a grandes amenazas. La dictadura asesina de Bashar al-Assad - con el apoyo total del imperialismo ruso, así como de Irán, continúa con la guerra de destrucción masiva contra su propio pueblo. Al mismo tiempo, la Revolución Siria se ve amenazada por la subida del Daesh contrarrevolucionario (el llamado "Estado Islámico"). Por último, pero no por ello menos importante, todas las grandes potencias están unidas en su determinación de liquidar la Revolución Siria ya que temen tanto una desestabilización del orden imperialista en toda la región, así como crecientes oleadas de refugiados que están llegando a Europa.

 

La ola de luchas populares en América Latina en la última década formó la base para la elección de un cierto número de gobiernos populistas burgueses y de frente popular (por ejemplo Rousseff en Brasil, Chávez / Maduro en Venezuela, Morales en Bolivia, Correa en Ecuador, y Kirchners en Argentina). Estos gobiernos, dominados por un sector de la burguesía y gobernando en los intereses de la burguesía, y teniendo como base apoyo los trabajadores y las organizaciones populares - pudieron ofrecer algunas concesiones a las masas populares, a partir del momento que experimentaron una cierta recuperación económica en función de la intensificación de sus préstamos comerciales y extranjeros y las inversiones por parte de China imperialista. Sin embargo, con la desaceleración de la economía china y los esfuerzos de intensificación del imperialismo estadounidense para recuperar la hegemonía en su "patio trasero", el modelo burgués reformista del Castro-Chavismo se ha agotado y ha desilusionado a las masas.

 

Grecia, una semicolonia moderna en el sur de Europa, es el ejemplo más destacado de la presión brutal que los países europeos más pobres están sufriendo por la UE y los monopolios imperialistas. Sin embargo, Grecia ha sido también la vanguardia de la lucha de clases Europea en los últimos años con hasta 40 huelgas generales. Como resultado, el partido de izquierda reformista Syriza fue elegido en el gobierno en enero de 2015. Sin embargo, fiel a su naturaleza como un partido obrero burgués, traicionó abiertamente a la clase obrera mediante la formación de un frente popular con el partido de derecha racista ANEL y por capitular ante los programas de austeridad impuestas por la UE a pesar de la tremenda victoria del OXI ("No") en el referéndum el 5 de julio.

 

Las contradicciones de aceleración del capitalismo están provocando la lucha de clases, así como los ataques de la burguesía en todas partes del mundo. En China - un país capitalista que se ha convertido en el hogar del mayor número de multimillonarios en todo el mundo, así como del segundo mayor número de corporaciones multinacionales - los trabajadores y los pobres rurales están ganando confianza para expresar su disgusto contra los capitalistas, los gestores y los burócratas. Según el China Labour Bulletin con sede en Hong-Kong, el número reportado de huelgas y protestas en el país se ha duplicado cada año desde 2011. Del mismo modo, la India vio el 02 de septiembre de 2015 una de las mayores huelga general en su historia, con 150 millones de personas que participaron. En Pakistán también, los trabajadores continúan resistiendo a los jefes y los planes de privatización gubernamentales ejemplificado por los trabajadores de energía. En Tailandia, los obreros y campesinos pobres siguen sufriendo la grave derrota de mayo de 2014, cuando en el ejército lanzó un reaccionario golpe de Estado para derrocar el gobierno burgués-populista del primer ministro Yingluck Shinawatra.

 

En Sudáfrica, la clase obrera y la juventud han continuado la lucha contra el gobierno de frente popular del ANC de Jacob Zuma a pesar de la indignante masacre en Marikana en agosto de 2012. La ruptura de la federación sindical COSATU por su único gran sindicato NUMSA fue un paso correcto hacia adelante así como los últimos intentos para formar un movimiento político. A pesar de sus deficiencias reformistas, este proyecto pudiese llevar a la formación de un nuevo partido de los trabajadores. Del mismo modo, las protestas masivas de los trabajadores y los pobres en Burundi contra su dictador de largo tiempo Pierre Nkurunziza demostraron que las masas africanas no están dispuestas a sucumbir a sus dictadores reaccionarios y lacayos del imperialismo.

 

Sin embargo, a pesar de sus luchas heroicas, la clase obrera y los oprimidos no han sido capaces de detener los programas de austeridad de la burguesía, las ofensivas anti-democrático y la guerra imperialista. Peor aún, en algunos países la clase dominante ha lanzado ofensivas contrarrevolucionarias.

 

En el Oriente Medio y Norte de Africa las grandes potencias y sus lacayos locales intentan estrangular la revolución árabe mediante el apoyo a las dictaduras viejas y nuevas, así como por las intervenciones militares extranjeras.

 

En América Latina, importantes sectores de la burguesía han lanzado una ofensiva contrarrevolucionaria con el fin de deponer los gobiernos populares de frente popular. Ya han derrotado al gobierno kirchnerista en la Argentina, se debilitó sustancialmente el gobierno de Maduro en Venezuela y tratan de hacer el impeachment a Dilma Rousseff en Brasil.

 

En Europa, la clase dominante está alentando el chovinismo contra los inmigrantes - sobre todo de origen musulmán - y ha comenzado un proceso sistemático de militarización y represión interna. El presidente francés Hollande declaró el estado de emergencia de tres meses (con el apoyo del ex estalinista PCF y el Frente de Izquierda!), Extendió masivamente el poder legal del aparato estatal represivo y aceleró la intervención militar imperialista en Siria. Gran Bretaña y Alemania siguieron rápidamente con la misma medida. Las clases dominantes de la UE imperialista temen la masa de los refugiados que llegan a Europa (alrededor de un millón en 2015) y tratan de hacer que la gente se olvide de que sólo enfrentan a las consecuencias de su bárbara orden mundial!

 

Todos estos acontecimientos marcan el inicio de una nueva fase política: una fase que se caracteriza por la ofensiva contrarrevolucionaria mundial de la clase dominante que lleva a más programas de austeridad, represión interna y las guerras imperialistas y que provocará resistencia de las masas de la clase trabajadora y de los oprimidos .

 

Por desgracia, la clase trabajadora y los oprimidos sufren las consecuencias de la falta de una dirección revolucionaria. Su resistencia se ve impedida por la naturaleza reformista y populista y burocrática de sus liderazgos. Los líderes oficiales de los sindicatos y organizaciones populares, de los partidos reformistas, burgueses y pequeñoburgueses populistas (por ejemplo, los Castro-chavistas, kirchneristas y el PT de Rousseff y de Lula en América Latina, SYRIZA en Grecia y otros socialdemócratas en Europa, los estalinistas en la India o los maoístas en Nepal), así como de las diversas corrientes del islamismo (por ejemplo, los Hermanos Musulmanes, varios grupos rebeldes en Siria o los huthis de Yemen) - todos ellos no han podido ofrecer a los trabajadores y las masas populares un camino fuera de la miseria capitalista y la humillación. Su naturaleza política - independiente de sus proclamas oficiales "radicales" - es permanecer o formar parte del aparato estatal de la clase dominante capitalista. Por lo tanto, no es de extrañar que a menudo hayan sido, o aspirado a ser, un aliado de una o varias grandes potencias imperialistas.

 

Los centristas de diversa coloración - "revolucionarios" en palabras, oportunistas en acciones - son más bien parte del problema que de la solución. Como regla general, de manera oportunista se adaptan directamente al aparato burocrático de las organizaciones de masas y por tanto indirectamente a tal o cual Gran Poder imperialista. Denominamos , entre tantos otros: el CIT (Comité Por una Internacional de Trabajadores) dirigido por Peter Taffee, el CMI (Corriente Marxista Internacional) de Alan Woods, los lambertistas, así como la mandelista NPA en Francia que constantemente dejan de apoyar a la resistencia contra la ocupación imperialista en los países que son víctimas de su potencias imperialistas (por ejemplo, Afganistán, Irak, Mali, etc.); el morenista LIT (Liga Internacional de Los Trabajadores), que elogió el golpe de Estado en Egipto (así como el CMI), así como el movimiento reaccionario Euro-Maidan en Ucrania (como el también morenista UIT-Unidad Internacional de Trabajadores); los centristas franceses como la LO-Lucha Obrera que apoyan la supresión del derecho femenino de los musulmanes a llevar el hiyab en las escuelas; los Centristas británicos que apoyaron la chovinista huelga "Empleos británicos para trabajadores británicos" en 2009, denunciaron la sublevación de agosto de 2011 y que se oponen "frontera abierta para los Migrantes" (como el CIT y el CMI); varios centristas que se niegan a defender la Revolución Siria pero prefieren tomar una posición neutral (CIT, CMI, PTS / FT); los cliffistas (SWP en Gran Bretaña), que de manera oportunista han encontrado un lugar de convivencia pacífica en la facción parlamentaria de la izquierda reformista y pro-sionista Linke en Alemania y que han logrado el absurdo político en apoyar a Morsi de la Hermandad Musulmana en Egipto en 2012, de rechazar la defensa de los Hermanos Musulmanes contra las masacres del general Sisi en el verano de 2013, y de colaborar con apoyo al golpe de Estado en el llamado Camino del Frente Revolución; o aquellos centristas que muchas veces se adaptaran de forma oportunista a los Castro-chavistas (por ejemplo, los lambertistas en Brasil) y / o que han más recientemente y escandalosamente apoyado la derecha, oposición pró-Estados Unidos contra Chávez (por ejemplo Chirino / UIT en Venezuela en 2013 ) o en contra del gobierno del PT de Brasil (por ejemplo, apoyo del morenista LIT y UIT para las manifestaciones a favor del impeachment de Roussef.

 

Debemos elegir un camino diferente. Mientras la clase obrera y los oprimidos no posean un partido revolucionario de combate - a nivel nacional, así como en todo el mundo - no pueden tener éxito en su lucha por la liberación. Por lo tanto, la tarea más urgente en el actual período es la oportuna construcción de los partidos revolucionarios y de un nuevo Partido Mundial de la Revolución Socialista. Estos nuevos partidos revolucionarios se construyen en la lucha de clases, así como en la lucha contra las direcciones oficiales - los burócratas sindicales y traidores, la socialdemocracia, los estalinistas, los nacionalistas pequeño-burgueses y los islamistas - que consciente o inconscientemente, engañan a los trabajadores y oprimidos.

 

Para lograr avances significativos en esta tarea, la unidad de los revolucionarios de todo el mundo es deseable. Una unidad de este tipo puede lograr la construcción de una sólida organización internacional bolchevique que comparta un programa común, así como la comprensión común de los métodos de construcción del partido y por lo tanto sirve como una formación pre-partido para el nuevo Partido Mundial de la Revolución Socialista (que en nuestra opinión será la Quinta Internacional).

 

De frente con el avanzar de la contrarrevolución en el inicio de una nueva fase política, la CCRI llama a todas las sinceras organizaciones y activistas revolucionarios de todo el mundo a unirse en la lucha por la auténtica organización marxista internacional- lo que significa el bolchevismo aplicado para las condiciones del siglo 21. Tal organización internacional necesita claridad teórica y práctica. Debe basarse en una comprensión conjunta de la aplicación del programa revolucionario a la cuestión principal de hoy de la lucha de clase internacional. No sólo deben proclamar el camino de la liberación, también debe nombrar y luchar contra todos los obstáculos. En otras palabras, debe asumir la lucha contra las numerosas fuerzas de izquierda reformistas y centristas que desorientan y engañan a la clase obrera bajo la bandera del "marxismo" - que es un "marxismo", sin su objetivo revolucionario, un "marxismo" convenientemente oportunista adaptado a todos los posibles liderazgos no obreros (reformistas, populistas, islamistas, etc.) o un "marxismo", que vegeta en la supresión sectaria de la lucha de clases.

 

 

Por un enfoque revolucionario para los temas candentes de la Lucha de Clases Mundial

 

La claridad y la unidad programática tiene que ser examinada sobre la base de los temas más importantes de la lucha de clases mundial, tales como los siguientes:

 

* ¡Defender la Revolución Árabe contra sus enemigos extranjeros y nacionales! ¡Abajo las dictaduras reaccionarias en Siria, Egipto, así como las monarquías del Golfo! ¡No a la vuelta de la camarilla de Ben Ali en Túnez! Contra la banda de general Haftar en Libia! ¡Por las repúblicas de los trabajadores y campesinos!

 

* ¡La solidaridad internacional con la Revolución Siria en curso! ¡Continuar la lucha hasta el aplastamiento del Estado baasista! ¡Abajo la intervención militar de Rusia, así como las intervenciones del imperialismo francés, de Estados Unidos, del imperialismo británico y alemán! ¡No a cualquier acuerdo negociado por las grandes potencias! ¡Por el derecho del pueblo kurdo a la autodeterminación nacional! ¡Abajo lo reaccionario Daesh (Estado Islámico)!

 

* ¡Aplastar el Estado imperialista de Apartheid de Israel! ¡Por una República palestina socialista de Trabajadores e campesinos, democráticos, multinacionales desde el río hasta el mar ("Por una Palestina libre y Roja!")! ¡No a cualquier Solución de Dos Estados! ¡Victoria para la resistencia palestina! ¡Por la solidaridad popular internacional de los trabajadores como la campaña de Boicot!

 

* ¡Abajo agresiones imperialistas y las guerras en Afganistán, Irak, Siria, Yemen, Malí, Somalia y Corea del Norte: Derrota de la OTAN imperialista y las fuerzas rusas y sus aliados locales! ¡Estamos del lado de aquellos que resisten a los invasores imperialistas sin dar ningún apoyo político a los nacionalistas, los islamistas o las fuerzas estalinistas!

 

* ¡Detener la ofensiva contrarrevolucionaria en América Latina! ¡No al impeachmet del gobierno de Rousseff en Brasil! ¡No al gobierno de derecha de Macri en Argentina! Por un frente único de masas de los trabajadores y de las organizaciones populares que debería incluir aquellos bajo la influencia de los reformistas y populistas (como los kirchneristas, Castro-chavistas, etc.) Pero sin ningún apoyo político a los gobiernos do tipo burgués populista o de frente popular! ¡Expropiación de las corporaciones multinacionales de EE.UU., de la UE y de China! ¡A defender Argentina contra el imperialismo británico y patear a Gran Bretaña de las Malvinas!

 

*!A defender los derechos democráticos contra las dictaduras y semi-dictaduras! ¡Por frente únicos de masas de los trabajadores y las organizaciones populares - incluyendo aquellos dirigidos por reformistas, populistas y fuerzas islamistas - contra los regímenes bonapartistas reaccionarios (por ejemplo, Egipto, Tailandia, Burundi, etc.)

 

* ¡Apoyar la lucha de todas las naciones oprimidas por la autodeterminación! ¡Libertad para Azawad (Malí), Chechenia, el Este-Turkmenistán (China), Baluchistán, Cachemira, Irlanda del Norte, País Vasco, Cataluña, y el resto de otras naciones oprimidas! ¡Apoyar la lucha de la minoría afroamericana en EE.UU. (como el movimiento Black Lives Matter ), así como de los pueblos nativos / los pueblos indígenas en el norte y el sur de América por la liberación!

 

* ¡Igualdad de derechos para los inmigrantes! ¡No control de la inmigración en los países imperialistas! ¡Salarios iguales y plenos derechos de ciudadanía! ¡Igualdad para los inmigrantes y las lenguas de las minorías nacionales en el sector de la educación y la administración pública! ¡Por un movimiento revolucionario de los migrantes!

 

*!A luchar contra el chovinismo y la militarización de Europa! ¡A levantar el estado de emergencia en Francia! ¡No al despliegue del ejército en las calles de Europa! ¡Todas las tropas europeas fuera de África del Norte y el Medio Oriente! ¡A defender los inmigrantes musulmanes contra el racismo islamófobo! ¡Igualdad de derechos para los musulmanes! ¡No a las detenciones masiva contra los islamistas! ¡Abrir las fronteras a los refugiados!

 

* ¡Huelgas generales contra la ofensiva de austeridad! ¡ A detener los ataques a los salarios y los derechos de los trabajadores! ¡No más privatizaciones! ¡Cancelar la deuda pública! ¡Nacionalizar todas las empresas que despiden a los trabajadores o que declararse en quiebra bajo control obrero! ¡Expropiar a los bancos y corporaciones!

 

* ¡Apoyar la lucha de los trabajadores griegos y los pobres contra la UE-Troika! ¡Por una huelga general indefinida contra el Tercer Memorando! ¡Salir de la UE y luchar por un gobierno obrero! ¡Aplastar la UE imperialista mediante la Revolución Socialista! ¡Por los Estados Unidos Socialistas de Europa!

 

* ¡Abajo con todas las grandes potencias imperialistas - Estados Unidos, la UE, Japón, China y Rusia! ¡En cualquier conflicto político, económico o militar entre estas grandes potencias, el movimiento obrero no debe dar ningún apoyo a uno de ellos, sino que debe seguir el programa leninista del derrotismo revolucionario y declarar: el principal enemigo está en casa!

 

*! Por la liberación de la mujer mediante la revolución socialista! ¡Apoyar la lucha de los dalit y otras mujeres en la India contra la opresión sistemática! ¡Unidad autodefensa de de los trabajadores y los pobres para la defensa de la mujer contra la violencia! ¡Salarios iguales para las mujeres! ¡Por la socialización del trabajo doméstico! ¡Por un movimiento revolucionario de mujeres de la clase trabajadora!

 

* ¡Por la liberación de la juventud! ¡Abajo la represión estatal contra la juventud! ¡ A vengar el asesinato de 43 estudiantes de Ayotzinapa en México! ¡Solidaridad con los jóvenes inmigrantes en Francia y Gran Bretaña luchando contra la opresión! ¡Apoyar a las protestas de los estudiantes sudafricanos! ¡Por un movimiento revolucionario de la juventud!

 

Contrariamente a los reformistas burócratas como los Castro-chavistas, el Partido de la Izquierda Europea o del CP (Partido Comunista) de la India, los revolucionarios rechazan la ilusión de que tales demandas inmediatas, para no hablar de todo el programa, se pueden dar dentro del sistema capitalista. La aplicación temporal de tales demandas no se puede lograr a través de los métodos reformistas con un enfoque en las elecciones, el trabajo parlamentario y las reformas. El capitalismo en decadencia no es capaz de ofrecer ningún reformas duraderas significativas.

 

En vez de eso, los revolucionarios insisten que la lucha de liberación tiene que ser llevada a cabo por los medios de la lucha de clases sin concesiones y por el avance de la auto-organización de los trabajadores y los oprimidos. Es por esto que los revolucionarios apoyan todas las formas de lucha de masas según las circunstancias concretas - comenzando con manifestaciones masivas, huelgas generales, desde las ocupaciones hasta insurrecciones armadas y guerras civiles. Igualmente, los revolucionarios llaman a la formación de comités de acción de los trabajadores, de la juventud y las masas populares en los lugares de trabajo, los barrios, aldeas, escuelas y universidades. Además, los revolucionarios llaman a la formación de unidades de autodefensa para defender las huelgas y manifestaciones, así como a los inmigrantes o refugiados contra la policía y los fascistas. En situaciones de aguda lucha de clases, tales organismos se pueden ampliar para que los comités de acción puedan convertirse en los consejos (como los soviets en Rusia en 1917), respectivamente, de los trabajadores armados y milicias populares.

 

Rechazamos toda forma de sectarismo hacia las organizaciones de masas de la clase obrera. La aplicación de la táctica del frente único hacia los sindicatos y otros trabajadores y de las organizaciones populares de masas es un elemento fundamental en la consecución del objetivo estratégico para lograr la ruptura con la burocracia traidora. Esa táctica debe estar centrada en actividades prácticas y tiene que incluir la movilización y organización de los miembros de base, poniendo demandas a los líderes, advirtiendo a los trabajadores en contra de tener ilusiones en la dirección burocrática, así como hacer la agitación y la propaganda independiente. Por lo tanto, la táctica del frente único debe ir de la mano con las denuncias contra la burocracia y la negativa de cualquier bloque estratégico con su facción de "izquierda".

 

Trabajar dentro de los sindicatos y otras organizaciones de masas con el fin de revolucionarlos sigue siendo crucial. Los comunistas deben organizarse en facciones y ayudar a la construcción de un amplio de movimiento de trabajadores de base para luchar contra la burocracia privilegiada y para finalmente derrotarlas. Sin embargo, los revolucionarios también son conscientes de que los sindicatos suelen organizan solo una pequeña minoría de la clase obrera. Del mismo modo, los sindicatos suelen están dominados por la aristocracia obrera o por los sectores más acomodados del proletariado. Por lo tanto, es crucial aprovechar todas las oportunidades para construir comités de fábrica y órganos similares en las luchas con el fin de ampliar la base. Por otra parte, los revolucionarios deben esforzarse para organizar los estratos más bajos de la clase obrera y las capas oprimidas de los sindicatos y de traer representantes de estas capas en posiciones de liderazgo para que el dominio de la capa aristocrática pueda ser eliminado.

 

Los revolucionarios deben combinar su participación en la lucha de clases con un programa para el poder de la clase trabajadora. Esto significa la renuncia total de la ELP de, estalinistas y varios centristas (por ejemplo, CIT, CMI) la irrealista vía parlamentaria-pacífica al socialismo. Significa luchar por la construcción de consejos de acción obreros, campesinos y pobres, de las milicias populares armadas, por la expropiación de la clase capitalista y por un gobierno de trabajadores aliado con los campesinos y los pobres de las ciudades y en base a los consejos y las milicias locales. Significa preparar a la clase obrera para la insurrección armada, la guerra civil y la dictadura del proletariado como el único medio por el cual el proletariado puede avanzar en la lucha por la liberación.

 

Una Organización Internacional Revolucionaria como la Herramienta esencial para Luchar por el Programa

 

Estas son algunas de las preguntas más importantes de la lucha de clases mundial hoy. La claridad programática sobre qué hacer y qué no hacer, son básicas para una unidad revolucionaria sostenible. Sin embargo, no es suficiente ponerse de acuerdo sobre un programa. Uno debe saber cómo luchar por el programa. En resumen, lo que se necesita es la congruencia en el tipo de organización de combate que es la herramienta para poner el programa como realidad en la lucha de clases.

 

Los revolucionarios rechazan todos los conceptos que alaban los llamados "partidos anchos y pluralistas de izquierda" como el camino a seguir. Sin duda, estamos a favor de mayor flexibilidad organizativa y táctica hacia formaciones políticas que representen capas radicalizadas de trabajadores y oprimidos (incluyendo tácticas como entrar en este tipo de partidos como una facción revolucionaria o llamando a nuevos partidos de trabajadores). Pero rechazamos categóricamente el concepto de “los partidos de izquierda pluralistas" como un camino a seguir, ya que por lo general significa la unidad de los burócratas y los trabajadores, de los partidarios y opositores de las guerras imperialistas, de los partidarios del camino parlamentario pacífico, así como de la vía revolucionaria . En resumen, tal "Coalición de Izquierda" funciona como la unidad para paralizar las actividades revolucionarias, por lo tanto es una unidad inútil. Lo que la clase obrera necesita es un partido revolucionario de combate y esto tiene que ser proclamado abiertamente.

 

La lucha por un auténtico partido revolucionario mundial en la tradición de Marx, Engels, Lenin y Trotsky es el desafío más importante para los comunistas de hoy. Seguramente, en estos momento somos demasiado pequeños en número y no estamos suficientemente arraigados en la clase obrera. Pero, los grandes logros en la historia de la humanidad nunca son regalos del cielo, sino que se logra mediante el trabajo duro y sistemático. La formación de una organización internacional de los trabajadores oprimidos y revolucionarios decididos, sobre la base de un programa común y un entendimiento común de sus métodos prácticos y de organización es el requisito más importante para construir una nueva “Internacional revolucionaria”. Esto será fundamental para ganar otros y grandes sectores de los trabajadores de vanguardia en una fecha posterior.

 

No existe ningún camino nacional para construir el partido mundial, sólo un camino internacional. Por lo tanto, un verdadero partido revolucionario, así como la organización pre-partido deben existir como una formación internacional desde el principio. Sin una organización internacional, el centrismo nacional y finalmente desviaciones nacionalistas son inevitables. No existe la conciencia sin materia, no hay espíritu sin cuerpo.

 

Del mismo modo, el partido revolucionario, así como la organización pre-partido deben basarse en los métodos de organización del bolchevismo (centralismo democrático, organización de cuadros, etc.). El partido debe orientarse hacia ganar los mejores militantes entre la clase obrera y los oprimidos - en particular los de sus estratos bajo y medio. Por lo tanto, rechazamos la orientación de la mayoría de las organizaciones centristas hacia la intelectualidad de clase media, así como la orientación a la burocracia obrera y la aristocracia. Este tipo de trabajo no puede ser llevado a cabo solamente por los medios de propaganda, tiene que ser combinado con el ejemplar trabajo de masas.

 

Camaradas, estamos viviendo en un período complejo, tormentoso, rico en cambios y vueltas - es un tiempo para superar la rutina y dar pasos audaces hacia adelante! El CCRI hace un llamado a todos los luchadores por la liberación de la clase obrera y los pueblos oprimidos de todo el mundo a unir sus fuerzas en la lucha por construir un nuevo partido revolucionario mundial. Teniendo en cuenta las diferentes tradiciones y posiciones, puede ser que sea necesario formar primero un bloque o el Comité de Enlace entre varias organizaciones antes de que podamos lograr la unidad revolucionaria. Lo que serán etapas intermedias, el objetivo debe ser el mismo: la unidad revolucionaria para construir un nuevo Partido Mundial de la Revolución Socialista!

 

No hay futuro sin socialismo!

 

No hay socialismo sin revolución!

 

No hay revolución sin un partido revolucionario!

 

 

 

Animamos a las organizaciones y activistas que comparten el panorama general de esta Carta Abierta a ponerse en contacto con nosotros y hacernos llegar sus ideas y críticas para que podamos discutir medidas concretas para la discusión conjunta y la colaboración: rcit@thecommunists.net

 

 

 

El CCRI tiene secciones y militantes en Pakistán, Sri Lanka, Yemen, Túnez, Israel / Palestina ocupada, Brasil, Gran Bretaña, Alemania, EE.UU., y Austria.

 

Para una visión general mas amplia de los puntos de vista de la CCRI nos referimos aquellos que estén interesados en nuestro sitio web y, en particular, el programa de la CCRI: El Manifiesto Comunista Revolucionario, www.thecommunists.net/rcit-manifesto