In this section of the RCIT Forum, we publish various reports, articles and other documents by the Argentina-based organisation Convergencia Socialista (CS). The RCIT stands in close relations with the comrades of CS and has started a process of intense discussions and practical collaboration between our currents.
We recommend our readers to have a look on the website of Convergencia Socialista (CS) here: https://convergenciadecombate.blogspot.com
Republished in the RCIT Forum:
Argentina: Successful Public Meeting with Scientists on COVID Policy
Argentina: Remember the “Argentinazo” – the Great Uprising 20 Years Ago!
Fuera milicos de las calles, no al toque de queda, cuarentena para el FMI y los laboratorios
Hipócritas, así no se defiende la salud ¡Fuera milicos de las calles!
Por Musa Ardem, 2021-05-30 http://masnoticiassocialistas.blogspot.com/2019/05/la-victoria-de-netanyhau-la.html
La victoria del partido del fascista Netanyhau, vuelve a poner en el tapete la discusión acerca de las características del estado que conduce y sobre la posibilidad o no de reformarlo. En ese sentido, desde nuestra corriente, siempre hemos insistido en la necesidad de impulsar la destrucción de la institucionalidad sionista, para dar lugar a la construcción de un Estado Palestino, Laico, No Racista y Democrático. Para explicar esto, reeditamos una nota en la que desarrollamos nuestras posiciones:
Los judíos no son una raza, sino descendientes de un “pueblo con características de clase” que fue creciendo y desarrollándose en sociedades previas al capitalismo alrededor de actividades comerciales, como los fenicios y los lombardos. La diferencia con estos, es que a los judíos, la religión les otorgó una gran cohesión social.
Con la llegada del capitalismo, los sectores más poderosos -como los multimillonarios Rothschild o Hirsh- se acomodaron rápidamente dentro de la burguesía imperialista, mientras que los estamentos más plebeyos se incorporaron al proletariado y a la pequeña burguesía baja europea y de otros países, a donde emigraron.
En ese contexto, que modificó las características históricas de este pueblo, comenzó a desarrollarse una durísima pelea por el liderazgo de los sectores populares, entre la izquierda revolucionaria -que les ofrecía una perspectiva socialista- y el sionismo, que les proponía “huir del peligro subversivo” y las masacres perpetradas por los antisemitas, emigrando hacia las supuestas tierras “bíblicas”.
Según los sionistas, liderados por la gran burguesía judía, los judíos constituirían un “pueblo sin territorio” que debía marchar hacia un “territorio sin pueblo”. Inglaterra se hizo cargo de esta perspectiva, ofreciéndoles la colonización de Palestina, a través de la declaración del ministro de relaciones exteriores -Balfour- en 1917, con un tratado que históricamente se lo conoce por el nombre de este personaje.
Cuando finalizó la Primera Guerra los imperialistas se repartieron las posesiones de los derrotados -alemanes, austríacos y turcos- dejando a Palestina en manos de Inglaterra, cuyos líderes promovieron la emigración de colonos judíos, de manera de utilizarlos como fuerza de choque contra el movimiento de masas de la región, además de empleados y gerentes de sus empresas.
Fue así, que los sionistas emprendieron la tarea de organizar las bandas fascistas, denominadas Haganá, Stern e Irgun, junto con una central obrera absolutamente racista, la Histadrut. Estas herramientas o instituciones judías tuvieron el objetivo, explícito, de combatir a los palestinos, que fueron derrotados luego de la huelga general de 1936 -que duró seis meses- y un largo proceso de luchas que culminó en 1939.
Cuando finalizó la Segunda Guerra y EE.UU. se transformó en dueño del mundo los sionistas, que ya tenían contradicciones muy importantes con Gran Bretaña, se aliaron a los yanquis. Entonces, estos -junto al importantísimo apoyo de los rusos- les garantizaron la partición de Palestina el 14 de mayo de 1948, un acontecimiento que los árabes y palestinos denominan como Nakba o “catástrofe”, aunque ubicándolo a partir del 15 de mayo.
Limpieza étnica y fascismo
Con la Nakba se profundizó la expulsión de los palestinos, que en 1949 constituían más de un millón de personas viviendo en campos de refugiados de los países árabes fronterizos. Para consumar esta política, que desde las alturas del poder sionista denominaron “de transferencia”, las bandas de los judíos contrarrevolucionarios, torturaron y asesinaron a miles.
Para consumar este siniestro operativo, también utilizaron dos leyes, impuestas por sus instituciones reaccionarias: la de “propiedades de las personas ausentes” y la del “retorno”. Con la primera confiscaron los bienes de los que huían debido a las persecuciones y con la otra hicieron “retornar” a miles de judíos que nunca vivieron en Palestina para hacerse cargo de las posesiones de los “ausentes”.
Esta política es como la que proponía uno de los ideólogos del colonialismo británico -Cecil Rhodes- quien decía que la “mejor manera de solucionar los problemas de los pobres era llevándolos a África, para que se ocupen de explotar a los nativos y ocupar sus tierras”.
La OLP y los acuerdos de Oslo
Luego de la derrota de 1939, el pueblo palestino continuó resistiendo. En 1964 puso en pie la Organización para la Liberación de Palestina, una coalición de movimientos considerada por la Liga Árabe como la “representante legítima del pueblo palestino”, en cuyo programa se planteaba la necesidad de “destruir el Estado de Israel con la “lucha armada”, de manera de imponer el retorno de los refugiados y la autodeterminación palestina a través de un estado propio laico, democrático y no racista.
En 1993 su líder, Yasser Arafat, traicionó este programa aceptando la existencia del estado sionista, a cambio de que este reconociera a su organización; iniciando de esa forma los Acuerdos de Oslo, que terminaron beneficiando a Israel, que quedó a cargo de los asuntos exteriores, la defensa nacional, las fronteras y la seguridad de Cisjordania y la Franja de Gaza, los territorios “cedidos” a la OLP.
En Oslo se consensuó la creación de un autogobierno -la Autoridad Nacional Palestina- transfiriéndole algunos poderes y controles sobre Cisjordania y Gaza, como la educación, cultura, salud, bienestar social y el turismo. La traición de Arafat y el proceso de corrupción de la OLP manejando la Autoridad Palestina, facilitaron el avance de los grupos islamitas, como Hamas, que años después ganó las elecciones en la Franja de Gaza.
Intifadas y nueva derrota del ejército israelí
La primera Intifada, fue el levantamiento de 1987 en Franja de Gaza y Cisjordania, que empujó a los dirigentes de la OLP a negociar los acuerdos de Oslo. La segunda, que comenzó en 2000 fue un largo proceso que culminó con la derrota del ejército sionista en 2006 en Líbano, por parte de Hesbollah, las milicias shiitas -pro iraníes- instaladas en el Líbano.
Ocho años después, el heroísmo del pueblo de la Franja de Gaza desató un nuevo levantamiento en Cisjordania, que conmocionó a millones de personas de todo el mundo que ganaron las calles para repudiar a los sionistas en las principales capitales del mundo. La retirada del ejército israelí, que según los propios analistas judíos significa una “derrota” porque no pudieron acabar con las milicias palestinas, se logró gracias a una combinación explosiva entre la resistencia armada y las poderosas movilizaciones mundiales.
En ese contexto, en Israel se fortalecieron las tendencias más reaccionarias, encarnadas hoy por Netanyhau, quien volvió a ganar las elecciones, enfrentando a candidatos y candidatas tanto o más derechistas como los de su propio partido. Es que este país está habitado por varios millones de personas, muchas de ellas provenientes de otras regiones, que se han beneficiado con la continua expulsión de palestinos y toma de sus tierras y posesiones.
Esta gente defiende, por una cuestión de interés propio, la política del gobierno, promoviendo su profundización, ya que de la misma resultará un beneficio mayor. ¡Cuando más tierras palestinas se conquisten, más pasarán a sus manos! Un enclave, como Malvinas o el Peñón de Gibraltar, funciona de esta manera, actuando como una especio de “ejército de ocupación”, cuyos soldados forman parte de la mayoría de su población.
Por eso, desde nuestra corriente no proponemos la “democratización” de Israel, sino la destrucción de su estado, que en los hechos significa acabar con las instituciones que lo sostienen, para dar lugar a una construcción estatal sostenida por los verdaderos dueños de la tierra, aquellos que han sido expulsados o, si continúan allí, son oprimidos, humillados y explotados por la burguesía judía.
Esta perspectiva implica ganar a todos los sectores judíos dispuestos a sumarse, ya que la idea es poner en pie un estado no racista, absolutamente democrático y capaz de contener a todos los pueblos dispuestos a vivir dentro de las fronteras que se construyan. Buena parte de la izquierda adhiere a esta estratégica, aunque hay sectores, como el Partido Obrero, que no la aceptan, proponiendo la más que utópica y reaccionaria política de “democratización”.
Debate con el Partido Obrero
El sábado 30 de agosto de 2014, nuestro compañero Juan Carlos Beica participó en un debate sobre Palestina, que tuvo lugar en la localidad de Ingeniero Maschwitz, organizada por el Suteba Escobar, el Partido Obrero, la Lista Roja y Negra docente, Convergencia Socialista y otros sectores, junto al dirigente del Partido Obrero, Rafael Santos.
La charla fue muy buena, ya que sirvió para que los compañeros presentes tomaran conciencia de la necesidad de apoyar decididamente al pueblo palestino que lucha contra un régimen muy parecido al nazi fascista. En ese sentido, Kohan -ex sionista que militaba para la causa palestina- Santos y Beica coincidieron en muchos aspectos, aportando elementos históricos y actuales relacionados al surgimiento y desarrollo del sionismo.
Durante el debate el camarada del Partido Obrero insistió en la necesidad de tener una política destinada a ganar al conjunto del pueblo judío de Israel, de manera de avanzar hacia la construcción de un Estado Laico junto a los palestinos. Desde CS le contestamos que, estando de acuerdo en levantar consignas que ayuden a conseguir el apoyo de la mayor cantidad de judíos de Israel, no defendemos políticas que otorguen los mismos derechos a los oprimidos que a los opresores, como plantea el PO.
Para esta organización, el sionismo es apenas un “partido político que históricamente fue marginal dentro del pueblo judío”; y que -circunstancialmente- ha ganado el apoyo de la mayoría en Israel. Por lo tanto, esta situación podría cambiarse a través de una “pelea política”. Para nosotros, el Estado de Israel no es un conjunto de instituciones temporalmente dirigidas por una conducción política fascista -como sucedió en Alemania o Italia- sino una construcción artificial contrarrevolucionaria que fue impuesta mediante la expulsión de cientos de miles de personas de su patria.
¡Partiendo de esa realidad, impulsamos, como cuestión central, la autodeterminación de quienes fueron obligados a abandonar sus tierras, no de quienes las ocuparon violentamente, asumiendo que no habrá manera de garantizar la puesta en marcha de un Estado Palestino, Laico, Democrático, No Racista y Socialista sin Destruir el Estado Fascista Sionista de Israel; convocando a los judíos que están dispuestos a encarar esa tarea y enfrentando a quienes la combatan.
Las diferencias con el Partido Obrero son muy claras; por eso no es ninguna casualidad que durante todo el tiempo que duró la agresión militar del ejército israelí, en 2014, de la Franja de Gaza, sus dirigentes no hayan planteado esta consigna democrática elemental, sin la cual no habrá paz ni justicia social en Medio Oriente.
Por Ernesto Buenaventura, 18.5.2021, https://convergenciadecombate.blogspot.com/2021/05/chile-derrota-enorme-del-gobierno-y.html
El dato más significativo de las elecciones chilenas, para convencionales constituyentes, gobernaciones a intendencias, es la derrota escandalosa de la coalición que sostiene a Piñera, como así también la vieja Concertación. Estos, además de haber perdido varias gobernaciones, no alcanzaron el tercio de votos necesarios para poder vetar lo que finalmente se resuelva en la Convención Constituyente.
Sin embargo, el dato más importante de todos, que es el que expresa la tendencia general dentro del movimiento de masas, ha sido el avance fenomenal de las candidaturas “independientes”, como las que se organizaron a través de la Lista del Pueblo, cuyos candidatos y candidatas prometieron rechazar a los partidos políticos y alcanzar un Estado ambiental, igualitario y participativo. Ayer, 27 de sus representantes –entre ellos, la “tía Pikachú”- consiguieron un cupo en la Convención, posicionándose como una de las principales fuerzas de la nueva asamblea. (La Tercera, Chile, 17 de mayo)
Este mismo medio indicaba, que mientras en Chile Vamos se comenzaba a calibrar la derrota, que compromete el escenario presidencial, el Mandatario señaló que "no estamos sintonizando con las demandas de la ciudadanía" y se declaró en estado de reflexión. Ahora en el oficialismo se presiona por un cambio de rumbo que puede incluir un nuevo ajuste en el gabinete. (La Tercera, Chile, 17 de mayo)
Más allá de la coherencia o no de las posiciones políticas de los y las “independientes”, estos y estas conquistaron una gran cantidad de adhesiones, porque de una u otra manera expresaron la bronca obrera y popular y la necesidad de cambiar, en serio, la actual institucionalidad semi pinochetista, que se cae a pedazos golpeada por la crisis y las luchas obreras, como la última huelga de los portuarios.
La Convención Constitucional no resolverá nada, porque continuará gobernando quien perdió de manera escandalosa, y porque en ese espacio estarán representados partidos patronales de la oposición, como los que provienen del viejo PC, que pretenden imponer una política de recauchutaje de un régimen que debe ser tirado a la basura por el movimiento de masas, a través de la única herramienta que sirve para concretar esa tarea, la movilización.
La izquierda revolucionaria debe aprovechar este avance cualitativo de la crisis en las alturas, no para alentar la confianza en una institución cuyo único objetivo es cambiar algo para que nada cambie, sino para impulsar con más fuerza que antes, la construcción de las herramientas del poder obrero y popular -asambleas, cabildos, etc.- que voten las próximas medidas de lucha y se preparen para gobernar, reemplazando –revolución mediante- a las podridas instituciones del capitalismo semi-colonial chileno.
Por Damián Quevedo, Convergencia Socialista (Argentina), https://masnoticiassocialistas.blogspot.com/2021/05/netanyahu-los-capitalistas-y-la-ley-del.html
La nueva ofensiva del Estado Sionista de Israel sobre el pueblo palestino, pareciera marcar una tendencia reaccionaria, una especie de avance represivo sobre el movimiento de masas, buscando frenar las luchas en curso. Este aparenta ser la continuidad del curso iniciado a partir del golpe de Estado en Myanmar y la salvaje represión contra el pueblo colombiano, como formas clásicas de descargar la crisis del capitalismo sobre los y las trabajadoras.
Pero, insistimos, en que estos sucesos terribles, sólo en sus formas o apariencias están mostrando la existencia de Estados fuertes y burguesías que saben hacia dónde van. La criminal ofensiva sobre el pueblo palestino no es nueva, en los hechos los desalojos de pobladores de sus casas son moneda corriente en la Palestina ocupada, Sin embargo, en estos últimos días dieron lugar a una respuesta del movimiento de masas que augura el inicio de una Tercera Intifada, lo cual no sucede cotidianamente.
Algo cambió en Palestina, pero no es una modificación particular, sino que tiene que ver con el contexto, con la situación mundial, ya que en términos generales estamos ingresando, luego de la derrota de lo que hemos denominado "Contrarrevolución Covid", a una nueva situación revolucionaria, muy superior a la que tuvo lugar después de la caída del Lehman Brothers y la explosión de la fabulosa Primavera Árabe entre 2008 y 2010.
La reacción de Netanyahu y la burguesía israelí es el sueño de los capitalistas de todo el mundo, que pretenden aplastar -igual que en Siria, Nicaragua o Venezuela- a las masas. Los dueños del mundo, los grandes imperialistas, necesitan perpetrar una masacre -como en las dos guerras mundiales- de manera de reconstruir un nuevo ciclo "virtuoso", que luego de destruir competidores y fuerzas productivas les permita contar con un mercado para vender sus productos, saliendo de la actual crisis de sobre-producción.
Pero Netanyahu y los capitalistas, en general, saben que ese objetivo no fácil de conseguir en las actuales circunstancias, porque el movimiento de masas está recuperando la iniciativa, volviendo al ruedo con más fuerzas y niveles de radicalización que nunca antes en su historia. Por lo tanto, la ofensiva sobre Palestina no es otra cosa que un acto desesperado, empujado más que por la inteligencia de los líderes sionistas, por la profunda y letal crisis del régimen israelí, que busca con esta nueva Guerra contra Gaza lograr cierta cohesión, apoyándose en los sectores más reaccionarios de Israel.
En un marco como el actual, este tipo de ofensivas solo logran avivar la llamas de la rebelión en todo el mundo, actuando como lo que Nahuel Moreno llamaba 'ley del bombero loco", una situación en la cual se intenta apagar el fuego con nafta -de alto octanaje- lo que significa que todas y cada una de las medidas que utilizan los de arriba para intentar aplastar o frenar al movimiento de masas se le vuelven en contra. ¡Las bombas lanzadas contra la población civil de Gaza en vez de intimidad a sus ocupantes, los envalentonaron, pero también provocaron la irrupción de un gigantesco movimiento de solidaridad para con Palestina, que está ganando las calles de todo el mundo!
Palestina es una causa mundial
El mundo entero, a pesar de la propaganda del sionismo, se sensibiliza y expresa su solidaridad con el pueblo palestino, cada vez que el sionismo intenta una nueva masacre. Es que Palestina representa, hoy por hoy, uno de los más poderosos símbolos -quizá el más grande- de la lucha contra la opresión, mucho mayor al que décadas atrás representó Vietnam. ¡A los sionistas les resultará difícil, más bien imposible, derrotar al pueblo palestino, porque es una causa abrazada por todos los oprimidos y oprimidas del mundo!
La nueva intifada en curso explotó, no casualmente, en medio Oriente, la región del mundo en la que se inició el proceso revolucionario global posterior a la gran crisis de 2008, a través de la Primavera Árabe. Sin embargo esta nueva oleada revolucionaria no será igual que la anterior, sino muy superior, ya que sucede en un contexto en el que la burguesía ya agotó todas sus opciones.
Esta es una oportunidad histórica para la izquierda revolucionaria, pero también una responsabilidad enorme, porque existen condiciones inéditas para construir una nueva dirección revolucionaria, uniendo a las organizaciones -o fracciones de las mismas- que se ubiquen a la altura de las circunstancias. La crisis actual tiene sólo dos posibles salidas, la barbarie, si el capitalismo derrota al movimiento de masas, o el socialismo, si la clase obrera logra la unidad y la organización necesarias para destruir el capitalismo.
Desde el Comité de Enlace, que comenzamos a construir semanas atrás con los y las camaradas de la Corriente Comunista Revolucionaria Internacional, estamos aportando lo nuestro para la puesta en marcha de este, cada vez más necesario, Estado Mayor Socialista, sin el cual no habrá revolución triunfante.
By Damián Quevedo, Convergencia Socialista (Argentina), https://masnoticiassocialistas.blogspot.com/2021/05/netanyahu-los-capitalistas-y-la-ley-del.html
The new offensive of the Zionist State of Israel on the Palestinian people seems to mark a reactionary trend, a kind of repressive advance on the mass movement, seeking to stop the ongoing struggles. This appears to be the continuity of the course begun after the coup in Myanmar and the savage repression against the Colombian people, as classic ways of unloading the crisis of capitalism on the workers.
But, we insist, that these terrible events, only in their forms or appearances, are showing the existence of strong states and bourgeoisies that know where they are going. The criminal offensive against the Palestinian people is not new, in fact the evictions of residents from their homes are commonplace in occupied Palestine. However, in recent days they gave rise to a response from the mass movement that predicts the beginning of a Third Intifada, which does not happen on a daily basis.
Something changed in Palestine, but it is not a particular modification, but it has to do with the context, with the world situation, since in general terms we are entering, after the defeat of what we have called "Covid Counterrevolution", to a new revolutionary situation, far superior to the one that took place after the fall of the Lehman Brothers and the explosion of the fabulous Arab Spring between 2008 and 2010.
The reaction of Netanyahu and the Israeli bourgeoisie is the dream of capitalists around the world, who want to crush - as in Syria, Nicaragua or Venezuela - the masses. The owners of the world, the great imperialists, need to perpetrate a massacre - as in the two world wars - in order to rebuild a new "virtuous" cycle, which after destroying competitors and productive forces will allow them to have a market to sell their products, emerging from the current crisis of over-production.
But Netanyahu and the capitalists, in general, know that this objective is not easy to achieve in the current circumstances, because the mass movement is regaining the initiative, returning to the ring with more forces and levels of radicalization than ever before in its history. Therefore, the offensive on Palestine is nothing more than a desperate act, driven more than by the intelligence of the Zionist leaders, by the deep and lethal crisis of the Israeli regime, which seeks with this new War against Gaza to achieve a certain cohesion, relying on the most reactionary sectors of Israel.
In a framework such as the current one, this type of offensive only manages to fan the flames of rebellion throughout the world, acting as what Nahuel Moreno called the 'mad fireman's law', a situation in which an attempt is made to extinguish the fire with gasoline -High octane- which means that each and every one of the measures used by those above to try to crush or stop the mass movement is turned against it. The bombs dropped against the civilian population of Gaza instead of privacy! their occupants, they emboldened them, but they also provoked the irruption of a gigantic movement of solidarity towards Palestine, which is winning the streets of the whole world!
Palestine is a global cause
The whole world, despite the propaganda of Zionism, is sensitized and expresses its solidarity with the Palestinian people, every time Zionism attempts a new massacre. It is that Palestine represents, today, one of the most powerful symbols - perhaps the greatest - of the fight against oppression, much greater than the one that Vietnam represented decades ago. It will be difficult for the Zionists, rather impossible, to defeat the Palestinian people, because it is a cause embraced by all the oppressed and oppressed in the world!
The new Intifada under way exploded, not coincidentally, in the Middle East, the region of the world in which the global revolutionary process began after the great crisis of 2008, through the Arab Spring. However, this new revolutionary wave will not be the same as the previous one, but much superior, since it happens in a context in which the bourgeoisie has already exhausted all its options.
This is a historic opportunity for the revolutionary left, but also an enormous responsibility, because there are unprecedented conditions to build a new revolutionary leadership, uniting the organizations - or fractions of them - that rise to the occasion. The current crisis has only two possible ways out, barbarism, if capitalism defeats the mass movement, or socialism, if the working class achieves the unity and organization necessary to destroy capitalism.
From the Liaison Committee, which we began to build weeks ago with the comrades of the International Revolutionary Communist Current, we are contributing what is ours for the implementation of this, increasingly necessary, Socialist General Staff, without which there will be no triumphant revolution.
Por Damián Quevedo y Juan Giglio, Convergência Socialista (Argentina), 8 de maio de 2021, https://convergenciadecombate.blogspot.com/
La proposición del gobierno de Joe Biden de suspender las patentes en la industria farmacéutica -para “socializar” la producción de vacunas contra el Covid-19- causó revuelo internacional y la oposición de la industria o más bien de una parte de la misma. ¿Acaso será verdad que Biden mutó, convirtiéndose en el primer presidente izquierdista de la gran potencia?
Las apariencias engañan y mucho más los gestos del gobierno imperialista de los Estados Unidos, que atraviesa la peor crisis de la historia. Aunque la propiedad intelectual constituye uno de los pilares de la sociedad burguesa, no es la intención de Biden socavarla, atentando contra la apropiación privada en general, sino más bien en contra de algunas, como las de los capitales que compiten con una fracción del capital yanqui dentro del mercado mundial.
Pero la dispensa de patentes por si sola no aumentará la disponibilidad de vacunas en el mundo. Debe ir acompañada de un proceso llamado “transferencia de tecnología” en el que los dueños de la patente otorgan personal y conocimiento técnico. Los activistas también exigen que Biden use su influencia para garantizar que la fabricación se incremente en todo el mundo, y no solo por parte de las empresas farmacéuticas que ahora son titulares de las patentes. (New York Times, 06/05/2021).
Otra de las trampas, detrás del discurso de Biden, radica en el hecho de que se puede promover la publicación de una fórmula, pero para fabricarla, como cualquier mercancía que requiera cierto grado de complejidad productiva, hay que contar con la tecnología adecuada y la fuerza de trabajo capaz de utilizarla. En este caso, la propuesta del presidente Biden, de concretarse, deja a la mayoría de los países del mundo -el arco de los países semi coloniales o periféricos- por fuera de la discusión.
Es decir, la autorización legal para fabricar algo, no significa la posibilidad real de hacerlo, como sucedería, por ejemplo, con la vacuna Sputnik, en nuestro país. Entonces la discusión, o mejor dicho la disputa, se reduce a un cierto número de empresas multinacionales, que los Estados imperialistas están representando e impulsando, de manera de copar el mercado internacional.
No resulta casual que la respuesta, contraria, más firme -a la iniciativa de Biden- haya venido de la Unión Europea: El gobierno de la canciller alemana, Angela Merkel, se opuso hoy a la exención de las patentes de las vacunas contra el coronavirus, una iniciativa que recientemente recibió el apoyo clave de Estados Unidos, además del de Francia y Rusia. El plan de Estados Unidos crearía “complicaciones graves para la producción de vacunas”, dijo el jueves una vocera del gobierno alemán en un correo electrónico, según informó la agencia Bloomberg. (La Nación, 06/05/2021).
La discusión en torno a las patentes es otro episodio de la llamada guerra comercial, que hoy por hoy tiene su expresión en la gran carrera por las vacunas, dentro de la cual EEUU no es el más beneficiado, ya que otros, antes que los yanquis, picaron en punta apenas comenzó la “pandemia”, o quizá antes, previéndola. Pero esta no es la única razón por la cual Biden le pegó a la competencia europea, también expresa, dentro de los Estados Unidos, una pelea entre monopolios de distintos rubros, quienes en definitiva disputan su lugar en las ventas, dentro de un mercado que más que ampliarse se contrae.
Esta “guerra interna” tuvo su expresión violentísima en Medio Oriente, cuando dos fracciones del capital yanqui terminaron enfrentándose en Siria e Irak. Una de estas, liderada por el finado senador John McCain, apoyó a Estado Islámico, mientras que la otra, conducida por Barack Obama apostó a la negociación con Bashar al Assad e Irán, fogoneando el “Pacto 5 más 1”, que finalmente se firmó, aunque desde ese momento ha sido cuestionado y petardeado por los perdedores.
McCain, ex marino y héroe nacional en Vietnam, representaba al poderosísimo “Complejo Militar Industrial”, que tuvo y tiene grandes relaciones con la industria biotegnológica, pilar fundamental de los monopolios medicinales. Barack Obama, probablemente Biden -o por lo menos una gran parte del Partido Demócrata- expresa los intereses de otros capitales, que mayoritariamente cotizan en Wall Street.
Esta pelea, que durante años se desarrolló de manera subterránea, haciéndose más o menos pública en Medio Oriente, continúa entrelazando monopolios que aunque tienen líneas de acción política parecidas, por ejemplo el apoyo a los confinamientos, por abajo se pelean entre sí, ya que la crisis limita la posibilidad de que todos los capitalistas se mantenga en pie. ¡La guerra comercial tiende a profundizarse, haciéndose cada vez más salvaje, e incluso a adquirir características de confrontación más directa!
En ese marco, el golpe de Biden contra las farmacéuticas, se sintió el mercado bursátil: Las acciones de farmacéuticas con vacunas contra el Covid-19 como Pfizer y BioNTech, Moderna o Novavax cayeron con fuerza este miércoles tras el anuncio de que Estados Unidos. Inmediatamente después de conocerse la noticia, los títulos de estas empresas se desplomaron en el mercado, aunque luego consiguieron remontar parcialmente desde los mínimos marcados antes del final de la sesión bursátil en Wall Street. (Infobae, 04/05).
Cualquiera sea el resultado inmediato de esta guerra, que tiene lugar en el marco de una lucha inter-imperialista más general, que es la que sucede entre las grandes potencias -Estados Unidos, Unión Europea, China, Rusia y Japón- constituye uno de los motores fundamentales que empujan a la situación mundial hacia una crisis inédita, abriendo grietas enormes en las alturas del poder, por las cuales se filtran las rebeliones obreras y populares, que no sólo se multiplicarán sino que se radicalizarán cada vez más.
La izquierda revolucionaria deben, en las actuales circunstancias, agitar con audacia sus banderas socialistas, aprovechando la debacle de los capitalistas para liderar la próxima oleada de revoluciones, como la que están protagonizando los trabajadores y el pueblo de Colombia. La construcción de un Estado Mayor revolucionario, en términos internacionales, es la tarea fundamental del momento.
By Damián Quevedo and Juan Giglio, Convergência Socialista (Argentina), 8 May 2021, https://convergenciadecombate.blogspot.com/
The Joe Biden government's proposal to suspend patents in the pharmaceutical industry - to "socialize" the production of vaccines against Covid-19 - caused an international stir and opposition from the industry or rather from a part of it. Is it true that Biden mutated, becoming the first leftist president of the great power?
Appearances are deceiving and much more the gestures of the imperialist government of the United States, which is going through the worst crisis in history. Although intellectual property constitutes one of the pillars of bourgeois society, it is not Biden's intention to undermine it, undermining private appropriation in general, but rather against some, such as those of capital that compete with a fraction of capital Yankee within the world market.
But the patent waiver alone will not increase the availability of vaccines in the world. It must be accompanied by a process called "technology transfer" in which the patent owners provide staff and technical knowledge. The activists are also demanding that Biden use his influence to ensure that manufacturing increases around the world, and not just by the pharmaceutical companies that now hold the patents. (New York Times, 05/06/2021).
Another trap, behind Biden's speech, lies in the fact that the publication of a formula can be promoted, but to manufacture it, like any merchandise that requires a certain degree of production complexity, it is necessary to have the appropriate technology and workforce capable of using it. In this case, President Biden's proposal, if it materializes, leaves most of the world's countries - the arc of semi-colonial or peripheral countries - out of the discussion.
In other words, the legal authorization to manufacture something does not mean the real possibility of doing it, as would happen, for example, with the Sputnik vaccine, in our country. So the discussion, or rather the dispute, is reduced to a certain number of multinational companies, which the imperialist states are representing and promoting, in order to take over the international market.
It is no coincidence that the strongest, opposite response - to Biden's initiative - has come from the European Union: The government of German Chancellor Angela Merkel today opposed the exemption of patents for coronavirus vaccines , an initiative that recently received key support from the United States, in addition to France and Russia. The US plan would create "serious complications for vaccine production," a German government spokeswoman said in an email on Thursday, the Bloomberg agency reported. (La Nación, 05/06/2021).
The discussion around patents is another episode of the so-called trade war, which today has its expression in the great race for vaccines, within which the US is not the most benefited, since others, before the Yankees , they poked at the beginning of the "pandemic", or perhaps before, anticipating it. But this is not the only reason why Biden hit the European competition, it also expresses, within the United States, a fight between monopolies of different sectors, who ultimately dispute their place in sales, within a market that rather than expanding, it contracts.
This "internal war" had its most violent expression in the Middle East, when two fractions of US capital ended up facing each other in Syria and Iraq. One of these, led by the late Senator John McCain, supported the Islamic State, while the other, led by Barack Obama, bet on negotiations with Bashar al Assad and Iran, sparking the "5 plus 1 Pact", which was finally signed, although since then he has been questioned and backfired by losers.
McCain, a former sailor and national hero in Vietnam, represented the very powerful “Military Industrial Complex”, which had and still has great relationships with the biotech industry, a fundamental pillar of the medicinal monopolies. Barack Obama, probably Biden - or at least a large part of the Democratic Party - expresses the interests of other capitals, which are mostly traded on Wall Street.
This fight, which for years took place underground, becoming more or less public in the Middle East, continues to interweave monopolies that, although they have similar lines of political action, for example support for confinements, are fighting each other at the bottom, since the crisis limits the possibility that all capitalists will remain standing. The trade war tends to deepen, becoming more and more savage, and even to acquire characteristics of more direct confrontation!
In this context, Biden's blow against pharmaceutical companies, the stock market was felt: The shares of pharmaceutical companies with vaccines against Covid-19 such as Pfizer and BioNTech, Moderna or Novavax fell sharply this Wednesday after the announcement that the United States. Immediately after the news was known, the titles of these companies collapsed in the market, although they later managed to partially recover from the lows marked before the end of the trading session on Wall Street. (Infobae, 04/05).
Whatever the immediate result of this war, which takes place within the framework of a more general inter-imperialist struggle, which is that between the great powers - the United States, the European Union, China, Russia and Japan - constitutes one of the fundamental engines that push the world situation towards an unprecedented crisis, opening huge cracks in the heights of power, through which the workers' and popular rebellions are filtered, which will not only multiply but will become more and more radical.
The revolutionary left must, under the current circumstances, boldly wave its socialist flags, taking advantage of the capitalists' debacle to lead the next wave of revolutions, such as the one that the workers and people of Colombia are leading. The construction of a revolutionary General Staff, in international terms, is the fundamental task of the moment.
Por Juan Giglio, Convergencia Socialista (Argentina), el mayo 09, 2021, https://convergenciadecombate.blogspot.com/2021/05/covid-laboratorios-bloquean-desarrollo.html
Desde CS venimos denunciando que los gobiernos capitalistas utilizan al Covid-19 para emprender una dura ofensiva contra el movimiento de masas, empujándolo a “quedarse en casa” y no pensar en otra cosa que no sea su vida, de manera de desviar la atención del conjunto y, en ese marco, imponer un ajuste tremendo que significa rebajas salariales nunca vistas, liquidación de conquistas laborales, despidos a mansalva y un largo etcétera de ataques al nivel de vida de los trabajadores y los pueblos.
Además, las grandes empresas monopólicas, ligadas a la biotecnología medicinal, la virtualidad y las finanzas internacionales, están aprovechando la ocasión para realizar negocios gigantescos, razón por la cual a sus dueños y CEOs les conviene mantener a millones aterrorizados, más que curarlos, ofreciéndoles sus productos y sus créditos usurarios.
Nuestra denuncia nunca significó negar la existencia de contagios ni que, en ciertos casos -vejez, personas con comorbilidades o defensas insuficientes, etc.- estos pueden resultar letales. Por esa razón, venimos planteando la necesidad de enfrentarlos con metodologías que han demostrado gran efectividad, a pesar de no ser avaladas por la industria medicinal, que fabrica toneladas de vacunas -todavía son experimentales- con un único propósito, que es el de ganar fortunas.
Sin ir más lejos, en nuestro país se han investigado y desarrollado varias técnicas muy eficientes, baratas y fáciles de aplicar, como el suero equino o el ibuprofeno soluble, que no han sido aprobados por los organismos estatales, debido a la oposición organizada por el lobby de los grandes laboratorios, que es el que le marca la agenda al gobierno.
El médico especialista en medicina interna, investigador clínico y neumonólogo, Alexis Doreski, -MN 141740- que investigó en Córdoba acerca del ibuprofeno soluble, decía al respecto -en una nota publicada por Infobae el 11 de junio de 2020- Estamos ante una enfermedad inflamatoria y no tiene lógica tratarla sin un antiinflamatorio.
Según Doreski, la idea de inhalar Ibuprofeno para desinflamar pulmones, surgió hace siete años, y es de Dante Beltramo, investigador principal de CONICET en CEPROCOR, quien modificó la molécula del ibuprofeno haciéndola 100% soluble en agua para administrarlo en nebulizaciones con el objetivo de tratar a pacientes con fibrosis quística... Beltramo empezó a investigar si era posible aplicar la molécula para esta nueva enfermedad.
Un año después, Infobae entrevistó a Gustavo Villar, un médico de 51 años que utiliza el Ibuprofeno Soluble en la Fundación Respirar -dirigida por Doreski- El tratamiento mostró buenos resultados en los más de 10 mil pacientes que ya la recibieron... puede cambiar la historia de la pandemia porque es fácil de aplicar, cualquier persona lo puede usar en su casa y es gratuito... (Infobae, 9 de mayo, 2021)
Villar no se explica por qué el gobierno no lo aprueba: La gente se muere ahora y no nos dejan entrar en ningún hospital, aunque el familiar vaya con las ampollas y el consentimiento informado en la mano”, afirmó. “El tratamiento es gratuito. Lo dona la fundación y no tiene costo. Nunca se pensó en lucrar con esto. Tratamos de que no se interne a los pacientes, porque después no podemos entrar a los hospitales a nebulizarlos”.
A los científicos que cuestionan el “dogma” oficial, impulsando tratamientos alternativos, les debe quedar claro que la lucha por la salud de la mayoría es política, porque deben enfrentar los intereses de las grandes multinacionales farmacéuticas, que no pretenden resolver rápida y expeditivamente la crisis sanitaria, más bien lo contrario, ya que lucran con su existencia. ¡Para eso será necesario derrotar el plan del gobierno, que es el plan de estos monopolios, a través de la lucha obrera y popular!
Para construir otro plan sanitario, habrá que financiarlo con fondos provenientes del no pago de la deuda externa y de la aplicación de impuestos progresivos a las grandes empresas. Así se podrá quintuplicar, o más, el presupuesto y poner en pie nuevos hospitales con todos los recursos y el personal que sea necesario. Un plan de estas características debería, además, jerarquizar y priorizar la investigación independiente, alejada de la influencia de la industria farmacéutica.
Convergencia Socialista, el mayo 08, 2021, https://convergenciadecombate.blogspot.com/2021/05/la-izquierda-argentina-con-las-masas.html
Por corresponsal Ayer, en horas de la tarde, se realizó una concentración (ver video) frente al consulado de Colombia, en el centro de la Ciudad de Buenos Aires, con la participación de cientos de militantes y simpatizantes de diferentes organizaciones de izquierda, como Convergencia Socialista, Defensorías de Géneros, el MST, Partido Obrero, PTS, Nuevo MAS, Comuna Socialista, Izquierda Socialista, COR, Democracia Obrera y otras, Luego de que lxs compañerxs de la Autodefensa del Arte iniciaran la jornada artística, bailando un par de tangos (ver video) se hicieron otras intervenciones artísticas solidarias para con los trabajadores y el pueblo que lucha contra la dictadura de Iván Luque.
Por Ernesto Buenaventura, el abril 28, 2021, Convergencia Socialista (Argentina), https://convergenciadecombate.blogspot.com/2021/04/1-de-mayo-recordemos-los-martires-de.html
Si estuviéramos en medio de una guerra, con ejércitos de un lado y del otro combatiendo de manera directa, no le diríamos a la clase obrera que se “quede en casa”, evitando las balas y esperando que la contienda finalice para ver con qué bando burgués deberá enfrentarse después. ¡Todo lo contrario, le recomendaríamos que participe, cavando trincheras, pertrechándose con las armas correspondientes y dotándose de una política independiente de la burguesía!
Eso es lo que hicieron Lenin, Trotsky y Rosa Luxemburgo, que frente a la Primera Guerra se dirigieron a los soldados de todos los frentes, pidiéndoles que no maten a sus hermanos de clase de otros países, sino que apunten los fusiles en contra de sus propios amos capitalistas. Algo parecido intentamos e intentaron hacer los revolucionarios más consecuentes en Medio Oriente, apoyando a la heroica resistencia siria, para, desde esa ubicación -principista- construir una alternativa socialista.
Hoy por hoy, la mayor parte de la izquierda abandonó esa concepción, aceptando mansamente la política imperialista de los toques de queda, con excusas tales como la de “aplanar la curva de contagios”, facilitándole el trabajo a la burguesía, que está haciendo lo que hizo siempre: ¡Pasar a la ofensiva contra el movimiento de masas para frenar sus luchas, liquidar competidores e imponer un nuevo “reseteo” económico, destruyendo fuerzas productivas, como en las dos grandes guerras!
Los trabajadores y los pueblos de todo el mundo reaccionaron más rápidamente que esta izquierda, cuyos dirigentes continúan actuando como “consejeros rojos de la OMS". Por eso, en todas partes están creciendo y extendiéndose las huelgas y las movilizaciones, como lo demuestran los heroicos y las heroicas combatientes de Myanmar, que enfrentan a la dictadura militar pro-china, construyendo barricadas y utilizando todo tipo de armas.
Así también lo expresan los portuarios y las portuarias de Chile, que decretaron una huelga contra el ajuste de Piñera, llamando a construir un paro nacional, situación que va en el mismo sentido que la que se vive en las calles de Londres, donde miles acaban de marchar en contra de las restricciones. Esta es, irremediablemente, la tendencia general, que más temprano que tarde le quebrará el espinazo a los ataques contra las libertades de los de arriba, que están inmersos en su crisis más grande.
En semejante contexto, la izquierda argentina, en vez de seguir el camino de Santiago de Chile, Londres o Myanmar, puso en pie actos vía zoom para conmemorar el Primero de Mayo. ¡Esto, en los hechos, mp es otra cosa que una ofensa a la memoria de los Mártires de Chicago, a quienes nunca se les hubiera ocurrido dejar de movilizarse, más allá de las dificultades que sufrían en ese período, debido a la endebles e inexperiencia propia y a la vitalidad de una burguesía que estaba transcurriendo una época de esplendor y crecimiento!
Tanto el FITu, como el Nuevo MAS, el PSTu, las distintas formaciones anarquistas y otros sectores, harán un Primero de Mayo por internet, dejando de lado la posibilidad de marchar unificadamente contra el ajuste y los ajustadores. ¡La izquierda mayoritaria, adaptada hasta los tuétanos al parlamentarismo burgués, busca -objetivamente y más allá de la voluntad de sus dirigentes- congraciarse con los enemigos del proletariado, acatando una de sus principales recomendaciones!
¡No es casual que buena parte de esa izquierda, durante el proceso revolucionario que explotó en Siria durante la Primavera Árabe, se excusó de intervenir alegando la “falta de alternativas independientes de la clase trabajadora”! Esa izquierda fue, por lo tanto, cómplice de la masacre perpetrada por el carnicero Bashar al Assad, que aprovechó las circunstancias para consolidarse en el poder asesinando a cientos de miles, con el apoyo activo del imperialismo ruso!
Convocamos a los luchadores y las luchadoras consecuentes a concurrir a nuestro acto -que tendrá lugar el sábado 1 de Mayo, a las 14.30 horas en la Plaza Constitución- rompiendo con estos partidos y sus políticas, para sumarse a la construcción de Convergencia Socialista, impulsando desde allí la cada vez más necesaria unidad de los revolucionarios y las revolucionarias consecuentes, de manera de construir el Estado Mayor de la Revolución que reclaman las actuales circunstancias.
In English:
The tribute to the Chicago Martyrs cannot be virtual, but on the street
By Ernesto Buenaventura
If we were in the middle of a war, with armies on one side and the other fighting directly, we would not tell the working class to “stay home”, avoid the bullets and wait for the fight to end to see with which side will have to face later. On the contrary, we would recommend that workers participate, digging trenches, equipping themselves with the appropriate weapons and endowing with a policy independent of the bourgeoisie!
That is what Lenin, Trotsky and Rosa Luxemburg did, who in the face of the First War addressed the soldiers of all fronts, asking them not to kill their class brothers from other countries, but to point their rifles against their own capitalist masters. Something similar we tried and tried to make the revolutionaries more consistent in the Middle East, supporting the heroic Syrian resistance, in order to build, from that location -principist- a socialist alternative.
Today, most of the left abandoned that conception, meekly accepting the imperialist policy of curfews, with excuses such as "flattening the contagion curve", making it easier for the bourgeoisie, which is doing what that he always did: go on the offensive against the mass movement to stop their struggles, liquidate competitors and impose a new economic "reset", destroying productive forces, as in the two great wars!
Workers and poor peoples around the world reacted more quickly than this left, whose leaders continue to act as “red advisers to the WHO.” This is why strikes and mobilizations are growing and spreading everywhere, as demonstrated by the heroic and the heroic fighters of Myanmar, who face the pro-Chinese military dictatorship, building barricades and using all kinds of weapons.
This is also expressed by the dockers in Chile, who declared a strike against Piñera's adjustment, calling for the construction of a national strike, a situation that goes in the same direction as that experienced in the streets of London, where thousands march against the restrictions. This is, inevitably, the general trend, which sooner or later will break the back of the attacks against the freedoms of those above, who are immersed in their greatest crisis.
In such a context, the Argentine left, instead of following the road to Santiago de Chile, London or Myanmar, set up events via zoom to commemorate May Day. This, in fact, nothing more than an offense to the memory of the Chicago Martyrs, who would never have thought to stop mobilizing, despite the difficulties they suffered in that period, due to the weak e own inexperience and the vitality of a bourgeoisie that was passing a period of splendor and growth!
FITu, as the New MAS, the PSTu, the different anarchist formations and other organizations, will hold a May Day online, leaving aside the possibility of marching unifiedly against the adjustment and the adjusters. The majority left, adapted to the bone to bourgeois parliamentarism, seeks - objectively and beyond the will of its leaders - to ingratiate itself with the enemies of the proletariat, following one of its main recommendations!
It is not by chance that a large part of that left, during the revolutionary process that exploded in Syria during the Arab Spring, excused itself from intervening, alleging the “lack of independent alternatives for the working class”! That left was, therefore, an accomplice in the massacre perpetrated by the butcher Bashar al Assad, who took advantage of the circumstances to consolidate himself in power by assassinating hundreds of thousands, with the active support of Russian imperialism!
We call on the fighters and consequent fighters to attend our act -which will take place on Saturday, May 1, at 2.30 pm in the Plaza Constitución- breaking with these parties and their policies, to join the construction of Socialist Convergence, promoting from there the increasingly necessary unity of the revolutionaries and the consequent revolutionaries, in order to build the General Staff of the Revolution that the current circumstances demand.