Las y los trabajadores frente a la recesión económica y el gobierno de la 4T

 

Xóchitl Katari, Agrupación de Lucha Socialista (Sección mexicana de la CCRI), 02/05/20, https://agrupaciondeluchasocialistablog.wordpress.com

 

 

En casi todo el mundo el capitalismo se tambalea y entre millones de trabajadores se extiende una sensación, palpable e inmediata, de incertidumbre económica tras la pandemia y obligados encierros prolongados por parte de los gobiernos.

 

Las políticas de privatizaciones y austeridad provocaron el declive económico a nivel internacional por lo que, desde el año pasado, entramos en una recesión que se ha convertido en una depresión económica, incluyendo a México y todo esto ocurrió antes de la pandemia. Hoy los capitalistas pretenden recargar su crisis sobre nuestros hombros cansados como trabajadores en los países dependientes de las Grandes Potencias, deshaciéndose de millones para acortar su inversión de capital, explotándonos aún más a los que quedemos con la “fortuna de tener empleo” y endeudando a nuestras familias para subsistir en la miseria. Incluso algunas Grandes Potencias como EEUU ya generó más de 22 millones de desempleados en el corto periodo de un mes durante la contingencia. ¿Qué nos espera a las y los trabajadores en México?

 

Recordemos que las condiciones laborales para miles de trabajadores se vienen agravando desde hace más de cuatro décadas por las políticas neoliberales que los capitalistas y sus gobiernos compinches impusieron. Frente a la falta de crecimiento de sus fuerzas productivas y una reducción en sus millonarias tasas de ganancias se lanzaron como buitres contra las conquistas laborales y sociales ganadas mediante la lucha de la clase trabajadora para lucrar con ellas. En México desde los ochentas avanzaron ríspidamente en imponer ese modelo facilitado por los gobiernos en turno PRI, PAN y PRD, incluso, ahora con el de MORENA que cedió a las presiones de D. Trump y firmó el T-MEC que contiene cláusulas agresivas contra la clase trabajadora, con el visto bueno de las centrales sindicales charras y el silencio cómplice de las mal llamadas centrales independientes.

 

La política laboral entreguista del gobierno de la 4T

 

Antes de desfallecer, el neoliberalismo da sus patadas de ahogado al pretender acelerar sus políticas anti obreras. En anteriores números de Lucha Socialista, hemos señalado la política de completa sumisión del gobierno de la 4T hacia el de EEUU desde su triunfo electoral (2018) y el ámbito laboral (junto con el económico, el de seguridad y el de migración) es uno de los temas clave en la actual relación de dependencia hacia el gobierno de D. Trump.

 

El T-MEC (Tratado México, EEUU y Canadá) firmado el 10/12/19 en Palacio Nacional tiene como propósitos esenciales desmantelar los sindicatos sobrevivientes en este país, eliminar los contratos colectivos de trabajo y flexibilizar aún más las condiciones laborales del proletariado mexicano; asimismo, con una serie de cláusulas comerciales, productivas y de patentes tecnológicas estratégicas, el imperialismo norteamericano busca estimular el traslado de empresas gringas que operan actualmente en territorio mexicano por sus bajos costos de inversión, hacia EEUU para la reactivación de su industria interna. Ademá, medidas como la elevación diferida de salarios en distintas regiones de México tienen como objetivo frenar el paso de migrantes centroamericanos y caribeños hacia EEUU y que se queden a laborar, al menos temporalmente, en México ya sea en las maquilas del norte, o bien, en la siembra de árboles y en la construcción de megaproyectos del sur.

 

En ese sentido, la Reforma Laboral aprobada en 2019 por la mayoría de los partidos y promovida por MORENA fue alineada completamente con los requisitos de los partidos demócratas y republicanos norteamericanos para beneficio de la economía imperialista yanqui a costa de los derechos de los trabajadores mexicanos.

 

Para pasar medidas tan brutales como eliminar los contratos colectivos que consagran los derechos laborales de todo un gremio o trabajadores de una compañía como la Volkswagen, D. Trump se robó el lema de “libertad sindical”. ¡En boca de Trump nada más falso y cínico! Inmediatamente el gobierno de López Obrador reprodujo el mismo discurso, incluso, contradiciéndose con sus propias declaraciones donde afirma que el gobierno no intervendrá en la vida sindical. Lo que en realidad pretende esta política laboral es el desmantelamiento y fragmentación en los sindicatos existentes; así como, reforzar el control corporativo bajo nuevos liderazgos cobijados bajo el actual partido en el gobierno, de aquellas estructuras sindicales que sea más difícil su desaparición como en PEMEX. Ante la persistencia de una mayoría de centrales sindicales charras, corporativas y blancas, éstas sólo pueden ser derrotadas por los trabajadores mismos, desde las bases organizadas para apropiarse de los sindicatos, democratizarlos de fondo para ponerlos al servicio de la lucha de los trabajadores.

 

Aunque la medida va dirigida, principalmente, a los sindicatos de la industria automotriz, maquilador y energético también alcanza a otros gremios organizados como el magisterio perteneciente al SNTE que es de los más numerosos y con una disidencia combativa como la CNTE. Las repercusiones de esta política laboral anti-sindical podemos observarlas en las pasadas elecciones para Comité Ejecutivo de algunas secciones magisteriales del SNTE, la imposición por parte del gobierno federal del voto individual y secreto, proceso controlado por la burocracia charra del SNTE, es completamente antidemocrática, por sus requisitos excluyentes sólo permite reciclar a los líderes de siempre. Mientras que, en las secciones donde la CNTE ha ganado la estructura sindical como Oaxaca y Michoacán, en esta última, estos nuevos mecanismos, agudizó las divisiones internas por facciones que pelearon por la dirección, fomentada, a su vez, por sectores magisteriales afines a MORENA. 

 

Por su parte, la respuesta de las centrales sindicales hacia esta nueva Reforma Laboral neoliberal fue completamente traidora hacia sus agremiados como siempre lo han sido la CROC y la CTM. A ello se sumó, la reprobable actuación de Napoleón Gómez Urrutia, dirigente del sindicato nacional de mineros (y de la Confederación Internacional de los Trabajadores, membrete de un elefante blanco creado bajo auspicio del obradorismo), quien encabezó desde el Senado la entrega de los derechos de los trabajadores. Mientras que, las centrales que se dicen independientes como la UNT tuvieron una nula reacción de resistencia. 

 

Los que dieron la buena sorpresa fueron sectores las y los trabajadores de las maquiladoras de Matamoros quienes rebasaron a sus líderes charros priístas, se fueron a huelga en decenas de maquilas de manera coordinada y ganaron el famoso 20/30 (20% de aumento salarial y 30% en bonos) y la formación de un sindicato independiente de alcance nacional y multiindustria. Necesitamos promover ese espíritu entre las bases de otras regiones.

 

Las y los trabajadores frente a la entrada de la depresión económica

 

Aunque la actual contingencia por el covid-19 en un primer momento puso en duda la aplicación del T-MEC por parte de legisladores y empresarios en EEUU ante la crisis sanitaria y económica profunda en la que se encuentra, es probable que en México, gobierno y empresarios aceleren gran parte de sus medidas aprovechando el pretexto de la pandemia.

 

En ciernes de la depresión económica mundial, entre millones de trabajadores se extiende la preocupación por que los frágiles puentes que los sostienen día a día caigan precipitadamente. Las condiciones de los mexicanos con la mala salud provocada por la misma explotación del capitalismo y con el 59% del PEA que tiene que salir a trabajar hace difícil o poco viable el confinamiento masivo en este país, miles de trabajadores no tienen de otra: arriesgarse al covid-19 o al hambre de su familia.

 

Los sectores más afectados están siendo el manufacturero, comercio, servicios, turismo y el sector informal. Los trabajadores de las maquilas de Ciudad Juárez están denunciando que los obligan a seguir trabajando a pesar de que ya se había reportado el caso de un trabajador enfermo por covid-19, de hecho, las empresas se incorporaron al confinamiento dos semanas después que a nivel nacional, gran negligencia (que ya ha provocado la muerte de 13 trabajadores) ya que ellos se encuentran con un grado de exposición mayor por compartir frontera con el país con más infectados y muertos, EEUU.

 

Mientras tanto, los trabajadores de la salud (desde médicos hasta personal de limpieza) están siendo explotados terriblemente por hallarse en el combate a la pandemia, incluso, exponiendo su salud por culpa del desfalco provocado por las políticas de ajuste hacia los hospitales públicos y por los empresarios del ramo de la salud que no renuncian a sus ganancias y lucran con la indumentaria en vez de donarla en estos momentos de emergencia. Peor aún, cuando el mismo presidente López Obrador les pide donar el 50% de su salario a médicos, enfermeras y residentes que están teniendo que destinar parte de su salario a comprar su propio equipo de seguridad para atender a los enfermos, ante la incapacidad del gobierno por otorgarlas.

 

Por su parte, a los maestros del sector público nos han exigido improvisar clases en línea, cuando sabemos de la enorme desigualdad en este país donde no todos los niños y jóvenes tienen acceso a una computadora personal o internet. Eso sí, los más beneficiados serán las grandes compañías de servicios de internet.

 

Otros de los más golpeados serán los trabajadores de las pequeñas empresas en servicios simplemente por el hecho de que al estar cerrados se están quedando sin sus ingresos diarios y otros más, no podrán regresar ante el posible quiebre de la empresa.

 

Recuperemos desde las bases, la democracia e independencia sindical, al servicio de los trabajadores

 

¡QUE LA CRISIS LA PAGUEN LOS CAPITALISTAS!

 

¡TRABAJADORES SI EL CAPITALISMO TAMBALEA, DERROQUÉMOSLO AHORA!

 

¡POR UN GOBIERNO DE LOS TRABAJADORES, CAMPESINOS, INDÍGENAS Y SECTORES POPULARES!

 

¡ORGANICEMOS UN PARTIDO REVOLUCIONARIO DE Y PARA LOS TRABAJADORES!